viernes, 30 de octubre de 2009

EL CRIOLLISMO: JOSE DIEZ CANSECO

Narrador y periodista peruano, a quien se considera un precursor del realismo urbano de la década de 1950. Desde temprano estuvo vinculado a varias revistas (Amauta entre ellas) y periódicos limeños, y más tarde de Madrid y París, donde vivió un tiempo. Se hizo muy popular por su periodismo festivo y satírico que usaba para lanzar agudos comentarios sobre la actualidad política, en la que siempre estuvo activamente interesado. De su obra narrativa cabe mencionar las novelas El Gaviota (1930), Duque (1934) y sus cuentos Estampas mulatas (1938), que se distinguen por su tono irónico, su habilidad para captar la vida popular y las situaciones que revelan la psicología criolla de personajes marginales, como delincuentes o contrabandistas. Su obra corresponde a un momento de transición en la narrativa realista del continente, que tras el predominio de la narrativa criollista y naturalista, trata de renovarse retratando los temas y ambientes urbanos que reflejaban el proceso de modernización social.

jueves, 29 de octubre de 2009

Carlos Oquendo de Amat


Figura casi mítica de la literatura peruana contemporánea, es el autor de Cinco metros de poemas. Oquendo de Amat fue casi un mito por varias razones: desapareció sin dejar rastro por un buen tiempo, murió joven en la exaltación revolucionaria de la Guerra Civil española y escribió un sólo libro memorable: Cinco metros de poemas (Lima, 1927). Recientes investigaciones han echado luz sobre la misteriosa y brevísima vida del poeta, que puede considerarse la expresión más pura e intensa del vanguardismo peruano de la década de 1920. Entre los 17 y los 23 años de edad, el autor, nacido en la remota región andina de Puno, escribió un puñado de poemas que publicó en revistas, además de los 18 textos que recogió en el mencionado libro; eso es todo lo que nos queda de él. Cinco metros de poemas no tiene páginas; en realidad es un plegable, un acordeón que, extendido, alcanza los cinco metros de los que habla el título. Aunque con propósitos distintos, es un lejano antecedente de Blanco del mexicano Octavio Paz. Todos los signos de la primera vanguardia están presentes: completa libertad para crear un mundo imaginario, juegos tipográficos y visuales, dinamismo, humor, erotismo. Las notas ultraístas y creacionistas dominan, pero también ofrece tenues espejeos del onirismo surrealista y vagas sugerencias de cinetismo; incluso hay toques indigenistas, como en el poema Aldeana. La anécdota ha desaparecido por completo; el lenguaje es transparente y delicado; las imágenes aletean y vibran como cuerpos volátiles en un espacio encantado, a medias entre el sueño y la vigilia. La limpidez casi líquida de estos versos y su temblor emocional se han mantenido intactos hasta hoy.

viernes, 23 de octubre de 2009

EL VANGUARDISMO




INTRODUCCIÓN.

El vanguardismo fue una corriente que vino de Europa y se caracterizó por una nueva sensibilidad que buscaba distintas formas experimentales, oponiéndose a las tradicionales. En la raíz de estos movimientos está la inseguridad humana por la crisis de una sociedad dividida entre tradicionalista y revolucionarios.

Entre los movimientos de vanguardia destacados en América son: el creacionismo iniciado por Vicente Huidobro, el ultraísmo representado por Jorge Luis Borges y surrealismo que aparece en algunas composiciones de César Vallejo o Pablo Neruda.

Estos movimientos no se limitaron a proponer un cambio formal en el lenguaje de la poesía. Por el contrario, desde los años que le siguen a 1920, la narrativa comienza a ser atendida con toda inquietud por algunos de los mismos escritores afiliados a los grupos de vanguardia. La década de 1920 a 1930 atestigua estos primeros intentos de escribir cuentos y novelas cuyo lenguaje, técnicas y temas se salían completamente del trillado despotismo regionalista.

HISTORIA DEL VANGUARDISMO.

Europa vivía, al momento de surgir las vanguardias artísticas, una profunda crisis, que desencadenó en la Primera Guerra Mundial y entonces, en la evidencia de los límites del sistema capitalista.
Si bien "hasta 1914 los socialistas son los únicos que hablan del hundimiento del capitalismo", como señala Arnold Hauser, también otros sectores habían percibido desde antes los límites de un modelo de vida que privilegiaba el dinero, la producción y los valores de cambio frente al hombre.
El resultado de esto fue la chatura intelectual, la pobreza y el encasillamiento artístico contra los que reaccionaron, ya en 1905, Picasso y Braque con sus exposiciones cubistas, y el futurismo que, en 1909, deslumbrado por los avances de la modernidad científica y tecnológica, lanza su primer manifiesto de apuesta al futuro y rechazo a todo lo anterior. Conocida es la frase de Marinetti: Un automóvil de carrera es más hermoso que “La victoria de Samotracia".
Así se dan los primeros pasos de la vanguardia, aunque el momento de explosión definitiva coincide con la Primera Gran Guerra y con la promesa de una vida diferente alentada por el triunfo de la revolución socialista en Rusia.
Corrían los días de 1916 cuando en Zurich, Tristan Tzara un poeta y filósofo alemán, decidió fundar el Cabaret Voltaire. Esta acta de fundación del Dadaísmo, explosión nihilista que proponía el rechazo total. El deseo de destrucción de todo lo establecido llevó a los dadaístas a rechazarse a sí mismos y destruirse a sí mismos. Algunos de los partidarios de Dadá, encabezados por André Breton, pensaron que las circunstancias exigian no sólo la anarquía y la destrucción sino también la propuesta; es así que se apartan de Tzara e inician la aventura surrealista.
La furia Dadá había sido el paso, pero había llegado a sus límites y Bretón y los surrealistas unen la sentencia de Jean Arthur Rimbaud, que junto con Baudelaire, Lautremont, Jarry, Van Gogh y otros serán reconocidos por los surrealistas como sus "padres”.
Así surge el surrealismo, al servicio de la revolución que pretendía recuperar aquello del hombre que la sociedad, sus condicionamientos y represiones le habían hecho ocultar: su más pura esencia, su Yo básico y auténtico. A través de la recuperación del inconsciente, de los sueños, de dejarle libre el paso a las pasiones y deseos, de la escritura automática, del humor negro, intentan marchar hacia una sociedad nueva en donde el hombre pueda vivir a plenitud.
En este pleno ejercicio de la libertad que significó la actitud surrealista, tres palabras se unen en un sólo significado amor, poesía y libertad.


CARACTERÍSTICAS.


  • El poeta vanguardista es inconforme, ya que el pasado no le sirve, tiene que buscar un arte que responda a esta novedad interna que el hombre esta viviendo, apoyándose en la novedad original que se lleva dentro.


  • Se deben abandonar los temas nuevos, ya que carecen de sustancia y no responden al hombre nuevo.


  • En algunos movimientos hay una tendencia a hacer plástica en la coloración de las palabras.


  • En la poesía se juega constantemente con el símbolo.


  • Los poetas reaccionan contra las reglas tradicionales de la versificación, necesitan una mayor libertad para expresar adecuadamente su mundo interior.


  • Reacciona contra el modernismo y los imitadores de los maestros de esta corriente, existe una conciencia social que los lleva a tomar posiciones frente al hombre y su destino.


  • Nuevos temas, lenguaje poético, revolución formal, desaparición de la anécdota, proposición de temas como el anti-patriotismo.


  • El punto de vista del narrador es múltiple.


  • Existe un vínculo estrecho entre al ambiente y los gustos del personaje.


  • Profundiza en el mundo interior de los personajes, pues se les presenta a través de sus más escondidos estados del alma.


  • El tiempo cronológico no es de suma importancia, sino el tiempo anímico y se toma en cuenta el aspecto presentacional, pues se limita a sugerir para el lector complete, el autor exige presencia de un lector atento que vaya desentrañando los hechos que se presentan y vaya armando inteligentemente las piezas de la novela de nuestro tiempo.




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